El Guru

Un guru es un maestro. En la mayoría de los campos del esfuerzo humano, cuando queremos aprender en serio naturalmente buscaremos un maestro.

La espiritualidad no es excepción a esto. La literatura védica intemporal de la India antigua nos informa que uno debe acercarse a un maestro espiritual a fin de lograr éxito en la vida en la adquisición del conocimiento espiritual.

Pero en concreto ¿qué es un maestro espiritual genuino y cómo se le puede encontrar? Eso está explicado en los siguientes versículos de la literatura védica: Sólo trata de aprender la verdad acercándote a un maestro espiritual. Inquiere sumisamente de él y ríndele servicio. Las almas autorrealizadas pueden impartirte conocimiento porque ellas han visto la verdad. A fin de aprender la ciencia trascendental, es esencial que uno se acerque a un maestro espiritual fidedigno (guru) dentro de una sucesión discipular, que esté fijo en la Verdad Absoluta.

Sri Krishna
Brahma
Narada Muni
Srila Vyasadeva
Srila Madhva
Sri Caitanya Mahaprabhu
Srila Rupa Gosvami
Srila Bhaktivinoda Thakura
Srila Bhaktisiddhanta
Srila Prabhupada

El conocimiento trascendental deriva de la Suprema Personalidad de Dios, El Señor Krishna. Desciende de un maestro espiritual a otro en una cadena ininterrumpida llamada sucesión discipular.

Un maestro espiritual genuino ha absorbido plenamente lo que su maestro espiritual, o guru, le ha enseñado. Un guru genuino es parte de una sucesión histórica de maestros, y sus enseñanzas no pueden desviarse de las de sus predecesores. Lo que es aún más, las enseñanzas de un guru genuino deben ser confirmadas por las de los grandes sabios tanto como por las Escrituras sagradas. Este es un sistema triple de control y equilibrio conocido en sánscrito como guru, sadhu y sastra.

Un guru genuino también debe estar fijo en la trascendencia, ser completamente versado en el conocimiento de las Escrituras, y, sin egoísmo, estar completamente dedicado al servicio de Dios.

Se podría cuestionar si una línea de maestros puede transmitir en forma precisa, sin cambio ni alteración alguna, un mensaje espiritual de una persona a otra a través de un largo período de tiempo. La respuesta es que sí, es posible; del mismo modo en que un cartero entrega los mensajes sin cambio alguno en ellos. El conocimiento trascendental es trasmitido únicamente por un maestro espiritual cabalmente honesto, alguien cuyas enseñanzas estén confirmadas por sadhu y sastra.

Algunas calificaciones ulteriores y más amplias del maestro espiritual auténtico han sido detalladas en los libros de los grandes eruditos védicos, que nos permiten así determinar fácilmente quién es un maestro espiritual genuino y quién no lo es.

El conocimiento védico puro en la línea de sucesión discipular se transmite de la misma manera en que uno podría recibir un fruto de mango de un número de personas sentadas en las ramas del árbol: la persona que estuviera en la cima recoge la fruta, que luego es pasada cuidadosamente hacia abajo, hasta que llega a la que está sobre el terreno, manteniendo el fruto intacto y sin cambio. De modo similar, el conocimiento espiritual puro nos es así impartido a través del maestro espiritual fidedigno que es parte de una cadena de sucesión discipular auténtica.